jueves, 30 de diciembre de 2010

Adjetivo calificativo




Semidormida aguardo su llegada...
Lunático
mezquino
cruel
egocéntrico
pesado
polvoriento
tonto
inmóvil
duro
melancólico
sonoro
y puntual reloj.
No dejo de pensar en ti,
y veo como apagas mis días
recordándome que sigo sola,
sola sí,
sola,
porque sola es sin él.

martes, 21 de diciembre de 2010

Herida




Herida superficial
de tijeras y alambres,
comisionista de tiritas,
y negociante de sangre.
 Herida erecta de
respetable hueso y
piel de diamante.
Representante del dolor
e indiscutible pavor,
licenciada en lágrimas y
autorizada en las guerras.
 Todo el mundo le teme,
nadie le quiere...
Estampa de tortura,
pegamento de chifladura.

viernes, 3 de diciembre de 2010

No tiene nombre




Sentirse arruinada de un modo emocional, sólo el desastre le aplaude. Sentirse muerta por dentro, seca como las áridas tierras que pisa, en un mar de posibilidades que sólo las ruinas de unos cimientos poco consistentes ganan la partida, muerta la reina todo terminó.
Las miradas son hostiles, las palabras poco logradas se pierden en la efusividad de una garganta mal dibujada, contornos desafiantes y lengua de goma elástica.
Las esperanzas se vuelven fracasos, la bondad y complacencia comida para gatos, la ignorancia una sombra que le ensucia los zapatos, toda una vida buscando algo que nunca llega, e indiscutiblemente parece que no se conoce o no existe.
Tan perdida siempre que no le quedan nubes por visitar, los colores se tiñen de oscuridad, y su corazón de hojalata empieza a oxidarse, a chirriar como unos dientes manchados que se frotan entre ellos para encontrar la luz.
Las historias son curvilíneas, le transportan en un lúgubre tren sin pasajeros, de un modo perecedero intentan hacerle ver una realidad que sólo esconde los pies al gato, la desconfianza se aproxima y hace gueto, unta su aséptico cuerpo en aceite de motor, de dudas y aberraciones tan deslizantes que para saltar de un extremo a otro debe de estar segura.
Un día le dije “tu tren se va”, y doy fe de eso, porque el tiempo ha roído la cuerda que le ataba a él, y desde entonces anda perdida dentro de una fosa con su nombre, aunque no sabe como se llama (aunque le llaman de muchas formas), realmente no tiene nombre.
Siempre buscó el amor, decidió indagar dentro de la belleza que hay a su alrededor, ser considerada y como dicen "buena persona", pero sólo encontró miseria, arrogancia, envidia y su compañero egoísmo, que saltan entre las teclas de un piano mal afinado y ofrecen sus desechos a personas como ella. Por esa razón emigró a una inventada realidad, al menos allí siempre está preparada para el batallón, los cañones siempre están alzados, y la decadencia se convierte en su escudo.

...el teléfono suena, y escucho una voz decir: "Me alegro que no me veas ahora. Sé, que en tus recuerdos ya no hay sitio para mi, que tu corazón de acero ya no es un condenado, por esa razón yo, no tengo nombre, no te podré hacer daño."

lunes, 25 de octubre de 2010

Tiempo




El tiempo vaga indiscutiblemente haciendo del reloj un agujero en la pared. No deja que veas lo que hay detrás, la condensación de humo que ha reservado, cae en forma de lágrimas, y moja tus pestañas que ansiosas intentan descubrir lo que hay detrás de la mohosa y putrefacta pared.
Días y horas, palabras y silencios bastan para que la carcoma penetre en la mente y colapse las buenas intenciones, los proyectos favorables y los desahucios mas deseados. Estos se perderán como el último billete que había en el roído bolsillo.
El tiempo es una máscara que cubre al corazón y con suaves caricias lo acuchilla y le hace perder la razón.
Tiempo, sólo el tiempo hace que exista la espera, que se retrasen las palabras, y las sonrisas desaparezcan. Sólo él sabe hacer de un momento agraciado un lúgubre entierro. Después de todo no es Dios quién nos hace más sabios y viejos sino el tiempo, que como un gato se frota en nuestras piernas esperando algo a cambio. Lo que ahora es futuro ya forma parte del pasado, el presente es sólo el entretiempo, el perfecto entretenimiento, el juguete que el tiempo nos regala con la intención de camuflar la pasajera o perenne demencia que se aproxima o formó parte de nuestra vida.

lunes, 11 de octubre de 2010

San Godofredo





Descubres un corazón muerto, enlutado, lúgubre, en el mayor complot de obstinación sugestiva jamás efectuado por aquel ser.
Decidió cortar la cuerda que le amarraba a un nebuloso corazón aséptico, se dispuso a tapar las protuberancias de su conciencia, a perfilar su sotabarba para huir al extrarradio en busca de un poco de concordancia en su inyectable vida, llena de sueños e inseguridades.
Su descomunal miembro era lo único que le quedaba, y unas pocas monedas en aquellos bolsillos rotos.

jueves, 7 de octubre de 2010

Afilacuchillas



La solitud ya no es la que era, tampoco la busco, y no la culpo.
El trecho que hay entre el antes y el ahora es demasiado estéril para que broten nuevas soledades y renovados deseos. El tiempo, el gran dictador del hombre, se abandona entre palabras fútiles e instigadoras de los corazones desnortados, aquellos que un día desearon algo y con golosas cuchillas cortaron el hilo que mantenían vivos los deseos.
Los afilacuchillas son gente depravada, perturbada y hostil que se camuflan en lo dulce de unas palabras hermosas. A éstos les encanta atrasar las horas, quitarle las pilas al reloj, pasarse con la sal en los guisos y prometer cosas que no van a cumplir.
La ultima vez que quise sonreír no pude, habían pegado mis labios con pegamento de ratas. Nada es lo era, nada es lo que es y nada será lo que suceda. No he vuelto a sonreír igual desde aquella vez.
Canturrea con tu cerda lengua las alevosías a él, que yo estoy cansada y tengo mejores cosas que hacer.

martes, 21 de septiembre de 2010

MENTIRA


Mentira, mentira, mentira, mentiras, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, otra mentira?, mentira, mentira, mentira, no te cansas de mentir, mentira, mentira, mentira, mentiras, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, dos mentiras más, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, por qué me mientes?, mentira, mentira, mentira, mentira, mentiras, más mentiras, mentira, mentira, mentira, mentira, mentiras, mentirás, mentías, cuatro mentiras más, mentira, mentira, mentira, mentira, mientes, mentira, mentiras, mentira, mentira, mentira, mentira, mentiroso, mentira, mentira, mentira, mentira, mentiras, mentiras, sigues mintiendo, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, mentira, te gusta hacerme daño? Y él respondió "No" ...MENTIRA.


(Eres una novela demasiado fácil de leer).

miércoles, 15 de septiembre de 2010

17:59h




Pocos días, segundos y palabras quedan para que concluya el final. Será en invierno cuando las lágrimas comiencen a florecer, y el tumulto del arrepentimiento sea insoportable y sólo quede aquella vieja cuchilla oxidada con la que jugar.
Como buen ilusionista enseña sólo aquello que desean ver, las cartas siempre boca bajo, la verdad bajo tierra. Endulzar con sombras irregulares la realidad del otro, el egoísmo y la charlatanería van cogidos de la mano (o pie).

_Aprendo todo lo rápido que mi corazón me deja..._

lunes, 6 de septiembre de 2010

ABECÉ



Arrinconar el corazón en la esquina más mohosa de la habitación, gritar fuerte sin ser soberbio, un descorazonamiento heterogéneo. Vocales, consonantes, puntos y comas.
El afilalápices ensaya su siguiente relato, lleno de aberraciones y falso acento, éste halaga al acéfalo mutilando su conciencia (como a la lluvia de verano le aplaudes).
Mientras desbarba el moho que recubre su corazón adiposo, le canta canciones chirriantes, está esperando el abreboca que se pospone para las 12, otra larga espera donde el esperpento se prepara para desmontar al corazón de hojalata.
Lo abrupto de la seguridad son las dudas, por eso en el abecé del espantapájaros sólo existe la redención al abatimiento.

sábado, 7 de agosto de 2010

Zozobra digestiva



La oscuridad avanza hostil, emanaba recuerdos, era inmediata.
Indubitablemente aquellas palabras en cursiva eran lactantes en aquel tetra brick caducado, eran mensajes embaucadores, que instigaban súbitas reacciones en su cuerpo.
La noche era tétrica, efervescente entre el batallón. Matizaba los segundos antes de que la pluraridad de aquellos besos acreditaran un futuro perecedero, carcomido por la redundancia de una historia que enredaba a la razón , haciendo de ella un fantasma que vagaba por las fúnebres esquinas de aquel tetra brick.
Sólo quería sentirse electrizado, y con el tirachinas lanzaba pócimas de barbitúricos a su húmeda garganta, livianas grageas de colores y formas que se apresuraban de un modo preponderante a efectuar su misión.
Se encontraba embelesado ante tales recuerdos, los podía palpar, era un desasosiego efusivo, un magreo individualista que sólo le servía para hacer de su polla algo más resistente.
La vecindad de aquellas palabras recorrían su aséptica carne con arrogancia, un prólogo mal escrito por un versificador resabido, y para poder ingerir sus palabras tenía que estar desnortado, ser una victima del fracaso, de una confusión que agoniza en la sombra, una perfidia imborrable.

No es necesario que saltes, hoy no le he dado cuerda a tu reloj, y tu hipnótico tiempo empieza agotarse, es mi forma de agradecerte tus fechorías, una forma de aplaudir tu tiranía, una torpeza por mi parte no haberlo realizado antes, pero admito que es entretenido verte desde mi sillón, sonando como fondo un predecible western.
Y allí, dentro del tetra brick cubierto de zozobra, abigarrado en la fatalidad del pasado, en la blandeza de un presente caducado y un futuro muerto, te encuentras tu.

martes, 27 de julio de 2010

Paraguas de sobremesa


La corrupción es toda negra, como los coches, corbatas, gafas y chaquetas.
La conspiración emocional es quebradiza, abyecta. Utiliza vocablos desconocidos, alimenta el ego de los perdidos, desequilibra la razón, la hace vulnerable a los cambios climáticos, al paso del tiempo.
Los te quiero se perdieron en aquel trozo de papel, que naufragará a la deriva en una imparcial lluvia de verano.

miércoles, 14 de julio de 2010

Neurótica suicida


Suicidios controlados por

títeres de plástico,

con porras de azúcar y caretas

de fiesta.

Esta noche voy a saltar del cuarto piso,

tumbaré mi cuerpo en el asfalto

y los sucios coches

disimularan mi estrago.

Vendrá mi madre ya fallecida

a cogerme por las rodillas,

de acero inoxidable

y cables cruzados.

Mis días de carmín negro

se quedaron atrás

y mis uñas como molinos cortan

el viento que

me hace suicida.

Salta! salta!

destruye la fuerza que te amarra,

que entrecorta los girasoles

que dan alegría a tus mañanas

deshidratadas.

Piensa lo bello que sería ser libre,

libre e inhumana hasta el fin

de la no existencia.

Desarrolla facultades que

volaran como gaviotas circundantes

de peces mestizos,

radioactividad divertida

que a todos les anima,

huye,

¡huye

de la idiosincrasia!